Thailandia
Sida
La epidemia de sida que se propagó durante la década del 90 llevó a una alta tasa de transmisión del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) de madre a hijo. Es por esto que muchos niños son ahora víctimas del sida.
Se han hecho grandes esfuerzos por proveer información a las madres afectadas de sida y han recibido atención médica. El riesgo de transmisión del sida en el presente es de un 2 %.
El acceso a la atención médica y psicológica debe mejorar para que los niños afectados de sida puedan alcanzar una condición estable que les permita disfrutar de sus vidas. En el presente, hay alrededor de 20 000 niños con sida y sólo 1000 de ellos tienen acceso a atención médica y psicológica.
Discriminación de niños con sida
Algunos niños con sida son tratados con desdén ya sea en la escuela o en el seno de sus familias. Se debilitan no solo físicamente debido a su enfermedad sino también psicológicamente a causa de cómo los perciben los demás.
Sus familias y amigos los abandonan y les temen. Además, cuando son diagnosticados con este virus, la gente a su alrededor los aísla. Sólo el apoyo psicológico de aquellos en quienes pueden confiar les dará la esperanza de vivir una vida más feliz y simple.
Educación
Se han hecho notables esfuerzos en lo que respecta a la educación y como resultado sólo el 2 % de los niños no asisten a la escuela. Actualmente, la educación primaria es gratuita y obligatoria.
Aquellos niños que no asisten a la escuela viven, principalmente, demasiado lejos y no disponen de los medios para llegar a alguna en bus. Además, los niños inmigrantes a menudo no pueden ni siquiera acceder a una educación. A menudo tienen prohibido el acceso a una escuela pública por lo que se ven obligados a acudir a una escuela privada.
Esto significa que sólo aquellos inmigrantes que poseen cierto nivel de ingresos pueden permitirse que sus hijos tengan acceso a la educación.
Trabajo infantil
Los niños con familias pobres son las primeras víctimas en lo que respecta a este tema. Como todavía ocurre, estas familias prostituyen a sus hijos para poder sobrevivir.
Estos niños vulnerables trabajan tanto en burdeles como en la calle en donde el turismo sexual abunda.
Aunque la ley prohíbe y castiga estas prácticas, todavía hay demasiados niños que se ven forzados a realizarlas.
También muchos niños inmigrantes se ven obligados a trabajar. Comúnmente se los puede encontrar en las calles vendiendo todo lo que puedan encontrar. En la actualidad hay 20 000 niños viviendo en las calles de las principales ciudades de Tailandia.
Maltrato infantil
Muchos niños en Tailandia son víctimas de abuso físico o sexual. Muchos de estos casos nunca se reportan ya que los niños temen represalias y aún no tienen acceso a infraestructuras capaces de ayudarlos a informar este tipo de violencia.
Generalmente, estos niños son abusados en el seno de su propia familia o en la escuela.
La mayoría de los casos de violencia sexual se dan en muchachas jóvenes y esto impacta seriamente en sus vidas. Son vulnerables y no se atreven a hablar sobre el trauma causado por lo que han tenido que soportar. Además, como consecuencia del abuso sexual, algunas de ellas quedan embarazadas, algo que altera radicalmente sus vidas.
Algunas organizaciones ofrecen un programa de asistencia social que acoge y mantiene a estos niños. Sin embargo, Tailandia debe hacer mucho más para protegerlos.
Detención de niños refugiados
Tailandia limita con Laos, que funciona como un país de asilo para muchos niños de Lao Hmong. Estos niños escapan de la persecución en su propio país con la esperanza de tener una mejor vida, algo que no sucede cuando llegan a Tailandia.
Al llegar son detenidos por las autoridades en centros de detención sucios con poca comida en donde a menudo sufren de deshidratación.
Un porcentaje importante de estos refugiados enferma debido a las difíciles condiciones de vida. Desafortunadamente, muy pocos doctores tienen acceso a estos centros. Por lo tanto, los niños son abandonados a su suerte y las condiciones de vida se deterioran día tras día.
Es por ello que se debe encontrar una solución para que los niños puedan volver a disfrutar de sus derechos, ya sea en Tailandia o en Laos.
Matrimonio infantil
En la actualidad, los matrimonios concertados son una práctica frecuente en Tailandia. Alrededor de un 20% de las mujeres entre 20 y 24 años de edad reportan haber contraído matrimonio al cumplir los 18 años.
En los matrimonios concertados, los padres obligan a las jóvenes a contraer matrimonio con un hombre que no conocen ni aman.
Generalmente, los padres eligen a un hombre de una familia adinerada ya que el sistema de la dote es todavía común. En la boda, el futuro marido les entrega el dinero a los padres de la joven novia a cambio de su mano en matrimonio.
El matrimonio precoz tiene graves repercusiones en la salud de las jóvenes particularmente porque no están preparadas para el embarazo y el parto.
Sida
La epidemia de sida que se propagó durante la década del 90 llevó a una alta tasa de transmisión del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) de madre a hijo. Es por esto que muchos niños son ahora víctimas del sida.
Se han hecho grandes esfuerzos por proveer información a las madres afectadas de sida y han recibido atención médica. El riesgo de transmisión del sida en el presente es de un 2 %.
El acceso a la atención médica y psicológica debe mejorar para que los niños afectados de sida puedan alcanzar una condición estable que les permita disfrutar de sus vidas. En el presente, hay alrededor de 20 000 niños con sida y sólo 1000 de ellos tienen acceso a atención médica y psicológica.
Discriminación de niños con sida
Algunos niños con sida son tratados con desdén ya sea en la escuela o en el seno de sus familias. Se debilitan no solo físicamente debido a su enfermedad sino también psicológicamente a causa de cómo los perciben los demás.
Sus familias y amigos los abandonan y les temen. Además, cuando son diagnosticados con este virus, la gente a su alrededor los aísla. Sólo el apoyo psicológico de aquellos en quienes pueden confiar les dará la esperanza de vivir una vida más feliz y simple.
Educación
Se han hecho notables esfuerzos en lo que respecta a la educación y como resultado sólo el 2 % de los niños no asisten a la escuela. Actualmente, la educación primaria es gratuita y obligatoria.
Aquellos niños que no asisten a la escuela viven, principalmente, demasiado lejos y no disponen de los medios para llegar a alguna en bus. Además, los niños inmigrantes a menudo no pueden ni siquiera acceder a una educación. A menudo tienen prohibido el acceso a una escuela pública por lo que se ven obligados a acudir a una escuela privada.
Esto significa que sólo aquellos inmigrantes que poseen cierto nivel de ingresos pueden permitirse que sus hijos tengan acceso a la educación.
Trabajo infantil
Los niños con familias pobres son las primeras víctimas en lo que respecta a este tema. Como todavía ocurre, estas familias prostituyen a sus hijos para poder sobrevivir.
Estos niños vulnerables trabajan tanto en burdeles como en la calle en donde el turismo sexual abunda.
Aunque la ley prohíbe y castiga estas prácticas, todavía hay demasiados niños que se ven forzados a realizarlas.
También muchos niños inmigrantes se ven obligados a trabajar. Comúnmente se los puede encontrar en las calles vendiendo todo lo que puedan encontrar. En la actualidad hay 20 000 niños viviendo en las calles de las principales ciudades de Tailandia.
Maltrato infantil
Muchos niños en Tailandia son víctimas de abuso físico o sexual. Muchos de estos casos nunca se reportan ya que los niños temen represalias y aún no tienen acceso a infraestructuras capaces de ayudarlos a informar este tipo de violencia.
Generalmente, estos niños son abusados en el seno de su propia familia o en la escuela.
La mayoría de los casos de violencia sexual se dan en muchachas jóvenes y esto impacta seriamente en sus vidas. Son vulnerables y no se atreven a hablar sobre el trauma causado por lo que han tenido que soportar. Además, como consecuencia del abuso sexual, algunas de ellas quedan embarazadas, algo que altera radicalmente sus vidas.
Algunas organizaciones ofrecen un programa de asistencia social que acoge y mantiene a estos niños. Sin embargo, Tailandia debe hacer mucho más para protegerlos.
Detención de niños refugiados
Tailandia limita con Laos, que funciona como un país de asilo para muchos niños de Lao Hmong. Estos niños escapan de la persecución en su propio país con la esperanza de tener una mejor vida, algo que no sucede cuando llegan a Tailandia.
Al llegar son detenidos por las autoridades en centros de detención sucios con poca comida en donde a menudo sufren de deshidratación.
Un porcentaje importante de estos refugiados enferma debido a las difíciles condiciones de vida. Desafortunadamente, muy pocos doctores tienen acceso a estos centros. Por lo tanto, los niños son abandonados a su suerte y las condiciones de vida se deterioran día tras día.
Es por ello que se debe encontrar una solución para que los niños puedan volver a disfrutar de sus derechos, ya sea en Tailandia o en Laos.
Matrimonio infantil
En la actualidad, los matrimonios concertados son una práctica frecuente en Tailandia. Alrededor de un 20% de las mujeres entre 20 y 24 años de edad reportan haber contraído matrimonio al cumplir los 18 años.
En los matrimonios concertados, los padres obligan a las jóvenes a contraer matrimonio con un hombre que no conocen ni aman.
Generalmente, los padres eligen a un hombre de una familia adinerada ya que el sistema de la dote es todavía común. En la boda, el futuro marido les entrega el dinero a los padres de la joven novia a cambio de su mano en matrimonio.
El matrimonio precoz tiene graves repercusiones en la salud de las jóvenes particularmente porque no están preparadas para el embarazo y el parto.